Profr. Gumaro Tonche Flores, Cronista Municipal de Francisco I. Madero, Coahuila
- Por Matías RODRÍGUEZ CHIHUAHUA
- 1 jul 2016
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Por la tarde del lunes 6 de junio dejó de existir el reconocido profesor, cronista y escritor Gumaro Tonche Flores, quien era originario y residente en Francisco I. Madero, ciudad lagunera del estado de Coahuila. La noticia de su deceso causó consternación en el sector magisterial así como en el ámbito de la cultura regional, campos en los cuales se desempeñaba el Profesor y Cronista, quien era miembro de la Asociación Estatal de Cronistas Municipales de Coahuila y de la ACNIHRLA en la Región Lagunera de Coahuila y Durango, A. C.
De su trayectoria en el rescate y difusión de la historia y cultura municipal diremos lo siguiente: el día 30 de noviembre de 1983, en acto púbico el Presidente Municipal de Francisco I. Madero, don José Ubaldo Zapata, por acuerdo de cabildo le otorgó el nombramiento de Cronista de la Ciudad en reconocimiento a la ardua labor de impulso y difusión acerca de la historia de su localidad, al tiempo que el activo compañero Gumaro Tonche se desempeñaba como entusiasta maestro de educación básica. Aquello motivó más las acciones del cronista y promotor cultural pues tiempo después, con apoyo de la Dirección General de Culturas Populares en Coahuila, Gumaro Tonche Flores logró la fundación del Museo Comunitario de Historia en su municipio. Con aquella iniciativa hizo la propuesta con sus amigos cronistas vecinos para constituir una agrupación de investigadores de la historia regional, un sueño que se realizó al lograr un encuentro de cronistas como él, formando la Asociación Estatal de Cronistas Municipales e Historiadores de Coahuila, A. C., llegando a ser vicepresidente de la misma, y para el siguiente período, su presidente regional para los estados de Coahuila y Durango en La Laguna. Sus propuestas y trabajos realizados en su comunidad fueron considerados y expuestos en las reuniones de la Asociación Nacional de Cronistas de Ciudades Mexicanas, A. C.
Siempre recordaremos de Gumaro sus interesantes propuestas en las frecuentes reuniones de trabajo e intercambio de experiencia laboral que nos permitieron conocer a nuestros homólogos compañeros de los 38 municipios de Coahuila a través de las sedes itinerantes donde autoridades municipales y el cronista anfitrión nos recibían, sabiendo que nuestra labor ha sido de colaboración con los Alcaldes y Gobierno del Estado en una tarea común: conocer y divulgar el patrimonio histórico de cada localidad coahuilense.
En su campo educativo como maestro del pueblo, Gumaro realizó una brillante y destacada labor al abrir para sus alumnos las puertas de la enseñanza pugnando siempre porque llegaran a conocer la historia de su pueblo y a sentir amor por el entorno social de sus habitantes, pioneros de lo que ahora es la ciudad y cabecera del municipio de Francisco I. Madero.
El cronista amigo deja un valioso legado de sus trabajos de investigación historiográfica de su localidad a través de su Monografía Municipal de profundo contenido, donde podemos encontrar de su narrativa y fina pluma el esbozo histórico del más joven de los municipios del Estado de Coahuila, documento en el cual se plasma información acerca de la cronología de hechos históricos de la ciudad y municipios a partir de 1895 a 2004. Luego el registro de los Decretos de la creación del municipio de Francisco I. Madero aquel memorable día 30 de Noviembre de 1936, siendo desde entonces su cabecera como Villa y con el mismo nombre: Francisco I. Madero. Luego se registra que 50 años después se expide el Decreto como CIUDAD con fecha 30 de Noviembre de 1986. No podría faltar en el trabajo de investigación del cronista Gumaro, el rico legado cultural del municipio a través de sus festividades religiosas, danzas tradicionales, música popular, las artesanías, incluyendo la cocina popular.
En sus registros y publicaciones quedan escritos el Periódico mensual llamado “La Hoja”; la Revista “El Cronista”, publicación mensual y gratuita; “Tus Folletos”, “Los antiguos pobladores de Coahuila”, fascículo coleccionable; “Registro de Artesanos del Municipio de Francisco I. Madero”, además de diversas publicaciones en la edición de libros y periódicos de la región. Elaboró el ensayo “DE TAJUARÍN A PRIMORDIAL”, sin faltar la producción de un CD titulado “Mi Pueblo y su Gente”.
Las huellas del cronista Gumaro Tonche Flores quedaron impresas en acciones colectivas con todos los miembros de nuestra Asociación de Cronistas Narradores e Investigadores de Historia de la Región Lagunera de Coahuila y Durango en muchos de los foros de información al público lagunero en diferentes festividades. Inolvidables son las plazas y estelas monumentales que hemos dejado en sitios históricos y de interés cultural en los municipios de la comarca. Las pruebas están en la Congregación de Mayrán, municipio de San Pedro, en esa misma Ciudad Heroica cuyo título lo promovió nuestra Comisión Nacional de Ciudades Heroicas de la ANACCIM. En el ejido El Amparo del municipio de Parras, Coahuila, está plasmada la actividad de los Cronistas en la Placa de granito conmemorativa de un hecho histórico nacional.
Agrego para los lectores interesados que, una breve semblanza de Gumaro Tonche Flores se podrá encontrar en el Diccionario Biográfico de Coahuila, edición de 1999, por el Consejo Editorial del Gobierno del Estado de Coahuila de Zaragoza. Edición que estuvo a cargo del Mtro. Arturo Berrueto González.
Enrique Gómez Dena, investigador de Historia, acerca del fallecimiento del Cronista de Francisco I. Madero, escribe: “Las malas nuevas, nadie, pero nadie las quiere conocer; pero nadie de los nadie las quiere vivir. Qué quisiéramos nosotros los humildes mortales, hacer de la existencia prestada una vida inmortal. Mas el dolor es inmedible e infinito cuando se pierde ese algo, que es parte de nuestra piel, de nuestro ser… Recuperarnos de esa verdad lleva su tiempo, y en ese tiempo lleva las lágrimas de los recuerdos. Gumaro, fuiste en la lista al llamado del Creador, errando así el ciclo de vida. El Tiempo, mi Dios, que sea con tu encanto donde pueda caminar por el resto del sendero. Tú ahí encontrarás el remanso de la paz y la armonía de la vida eterna en otro espacio”.