Secreto a voces
- Por un tal T A L Í N
- 23 ago 2017
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Abaten a Felipe de Jesús Pérez (a) “El Ojos”, cacique de Tláhuac, Estado de México, barrio Zapotitlán, colonia La Nopalera, el mero mero del cártel de la Mano con Ojos con influencia en Ixtapalapa, Milpa Alta, en contubernio con autoridades y funcionarios. Si ya sabían de estas actividades ilícitas de todo tipo de “La Mano con Ojos” y de sus líderes, ¿por qué hasta ahora les echaron el guante?
En todo México, delegaciones, municipios, regiones y estados, toda la gente sabe y conoce quiénes son los que promueven las actividades ilícitas y quiénes los protegen, pero a ciencia y paciencia de las autoridades operan impunemente y siguen trabajando en perjuicio de la sociedad mexicana. Mientras los malos sigan financiando campañas políticas, mientras sigan comprando ministerios públicos, jefes policiacos y magistrados, esto no se va a acabar. La corrupción es la madre de todos los males que nos aquejan.
Aunado a todos estos males, el robo de gasolina que no sólo en Puebla se realiza, sino en toda la república. Es una mafia coludida con las figuras que ostentan el poder. Son quienes mandan, por eso no funcionan las leyes jurídicas ni la impartición de justicia, porque nadie, óigalo bien, nadie puede impartir justicia o democracia sin la anuencia de los malos. Son ellos los que mandan. Las leyes, la democracia y los clamores del pueblo hace tiempo que no cuentan.
Hace ya varios sexenios cuando pepenaron al chino Ye Gon, López Obrador públicamente en red televisiva nacional dijo “investiguen a los Amigos de Fox”, “investiguen el robo de gasolina y los implicados a nivel nacional”; y no lo han hecho hasta la fecha.
No nada más el Estado de México, Sinaloa, Guerrero, Sonora, Tamaulipas, los estados fronterizos, Puebla, etcétera, son estados dominados por la mafia, sino que todo el país está en las mismas, sólo que solamente en algunos estados atacan frontalmente a los malos y atrapan y matan gente para “presentar” “jale”, mientras todo el país está en una terrible crisis de inseguridad, robos, extorsiones, secuestros, muertos, desaparecidos, fraudes, impunidad, cobro de piso y otras chuladas que todo padecemos.
¿Sí vio usted la película llamada “El Infierno”? como dijo el jotorrón de Juanga: “Te pareces tanto a mí, que no puedes engañarme”. O niéguelo usted.
Ai la vemos pa’lotra porque ya me voy a tapar la gotera. Dirá usted, “¿con polvo blanco?”; sí, con Bentonita.
